Aun cuando es muy pronto para que los economistas sepan a ciencia cierta cuál será el impacto en la economía mundial del terremoto japonés, el panorama es sombrío. Germán Alarco, investigador de Centrum Católica, consideró que esta no será solo una crisis, sino una catástrofe que afectará la recuperación económica de Estados Unidos y Europa. Según explicó, un día menos de producción en Japón son US$16 mil millones menos y, dados los daños registrados, serán mínimo tres semanas sin producir, lo que significará US$300 mil millones perdidos. La magnitud del daño no radicará solo en eso, añadió, sino en que importarán menos productos de Europa y América (se han destruido el 7% de sus puertos), sus empresas perderán valor en la bolsa (han caído US$700 mil millones), los recursos se orientarán a la reconstrucción y dejarán de comprar bonos estadounidenses. Esto ocasionará, dijo, una depreciación del dólar y una apreciación del sol que afectará seriamente las exportaciones no tradicionales.Sin embargo, Justin Lin, economista jefe del Banco Mundial, consideró que es poco probable que se tenga un efecto prolongado: en seis meses la economía japonesa empezará a registrar crecimientos.
CLAVES
Los japoneses estimaron que de agravarse la crisis nuclear las pérdidas serían de us$200 mil millones y que la desaceleración será más profunda si la escasez de energía se prolonga.
Se dará una contracción del pBi en el segundo trimestre, pero habría un repunte al final del año gracias a la reconstrucción.
No hay señales de una recuperación en la bolsa y es improbable que se hayan acabado las caídas, según el analista andré saenger, de iG Markets.
El área afectada por el tsunami produce cerca del 4,1% del PBI japonés.
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